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Los niños están presentes pero permanecen al fondo en este retiro romántico
El Reserve tiene una entrada más pequeña y elegante que la del hotel principal Paradisus, y durante el proceso de registro personalizado los huéspedes pueden sentarse y recibir una toalla caliente en el área de recepción con aire acondicionado. El vestíbulo está abierto a todas horas y tiene áreas de estar cómodas, computadoras, una televisión de pantalla plana, instalaciones para hacer café, y una bonita presentación de delicias gourmet.
Hay miembros de conserjería separados en cada edificio para ayudar con arreglos e instrucciones. Algunos edificios están más lejos que otros y pueden requerir un viaje desde el vestíbulo. Huéspedes con familias, por una cuota adicional, pueden ascender a la Sección de Conserjería Familiar para tener aún más comodidades. Gracias a la Zona de Niños y a la sección familiar de la piscina, los niños permanecen sin causar molestias. El lugar es tranquilo y relajado.
El Gabi Club (el bar y restaurante principal, donde se sirven tres comidas al día con vista a la piscina) es el centro de la propiedad. Durante el día, la piscina tiene una estación de aperitivos y bar de la piscina, y una sección específica familiar con toboganes. Por la noche, las familias pueden tener una cena temprana en el Gabi Club o dirigirse hacia uno de los restaurantes a la carta ya sea aquí o al lado. El entretenimiento y la música ocurren mayormente en el vestíbulo principal del Paradisus, pero muchas parejas están contentas de quedarse aquí para disfrutar tragos tranquilos y jardines preciosos, los cuales son particularmente románticos cuando se iluminan por la noche.
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Un tranquilo jardín a una caminata de Bavaro Beach
Un poco más al norte que sus propiedades hermanas en Palma Real, los huéspedes de las propiedades de Paradisus Punta Cana encontrarán que el viaje en coche demora 30 minutos en llegar aquí desde el Aeropuerto Internacional Punta Cana. Como es el caso de la mayoría de los hoteles de por aquí, no hay mucho que hacer fuera de sus puertas aparte de tal vez visitar Punta Cana Village, Higuey o el Cocotal Country Club y Golf Resort, a los cuales los huéspedes tienen acceso gratis también. Se trata de quedarse en la propiedad y disfrutar de la playa (eche un vistazo a la salida del sol), grandiosas áreas de piscinas, restaurantes y comodidades. De forma que se pueda llegar entre el Reserve y el más grande hotel Paradisus, esté preparado para caminar, montar en bicicleta o esperar un aventón en un carrito de golf.
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Unidades espaciosas de una habitación que atraen a familias y parejas
El Reserve es más pequeño que el adyacente Paradisus Punta Cana, con sólo 132 suites de lujo de un dormitorio. Todas tienen decoración clásica (muebles de caoba, suelos de mármol y tonos apagados) así como balcones grandes. Estas unidades son más espaciosas que las de al lado y tienen áreas separadas de salón/comedor con kitchenettes (aquí es donde están las cafeteras y los minibares que contienen cerveza, refrescos y aperitivos). Las mesas de comedor en cada unidad permiten a los huéspedes disfrutar servicio a la habitación (las cocinas pequeñas no están hechas para cocinar a lo grande), y la sala de estar es cómoda con un sofá-cama (para familias grandes, hay disponibles habitaciones contiguas). La TV de pantalla plana viene con un reproductor de CD/DVD, y Wi-Fi gratis disponible.
Los baños enormes son una característica que se destaca en estas unidades, con lavabo doble y grandes bañeras de hidromasaje para dos personas. Cabinas de ducha, aunque el diseño de alta tecnología, tiene sistemas de boquillas complicados que pueden ser un poco confusos para algunos.
De estas unidades, 48 están designadas como Suites de Conserjería Familiar que, por un costo extra, proveen a las familias un conserje familiar dedicado y servicios extra orientados a las familias (como servicio de mucama con leche y galletas).
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Los huéspedes en este hotel boutique también tienen acceso a las comodidades de al lado.
Aquellos que pagan el dinero extra para quedarse en The Reserve también tienen acceso al Paradisus, de forma que tienen lo mejor de los dos mundos: un hotel boutique más pequeño y tranquilo con cuartos más grandes, más todas las atracciones de un mega resort.
El Gabi Club, un buffet restaurante que sirve las tres comidas, es el centro principal de la propiedad. Como todos los restaurantes en el complejo Paradisus, ofrece comidas únicas y sofisticadas para todas las edades. El buffet cambiante es digno de fotografiarse. Para restaurantes a la carta, los huéspedes pueden quedarse en el lugar, o derrochar en una comida libre de niños en Passion, de la mano de una chef española con estrellas Michelin. Este y el restaurante de la playa La Palapa no están incluidos en la tasa normal; de cualquier manera, Aqua (incluido) tiene áreas de comedor privadas especiales separadas por caminos de madera individuales.
El club de los niños, llamado Kids Zone, es una atracción bien ocupada con talleres y actividades, acepta niños desde los cuatro meses. Es donde muchos padres acaban pasando tiempo también. Adicionalmente, la piscina en The Reserve tiene diferentes áreas adecuadas para los niños con juguetes y toboganes. Mientras los niños participan de la Kids Zone, los padres pueden ir al gimnasio o tener un masaje para parejas al aire libre en el YHI spa, un lujoso spa con temática asiática.
Para llegar a la playa y al área de piscinas, restaurantes, y entretenimiento nocturno en el vecino Paradisus, se recomienda a los huéspedes rentar bicicletas para su estancia (hay diferentes tamaños disponibles); vale la pena la molestia de recoger un candado. Los huéspedes también tienen acceso a canchas de tenis y tarifas de campo de golf gratis en el área de golf a unas millas de distancia.
